Según el reporte de la Dirección Regional de Salud, hasta ayer habían 21 pacientes con Covid-19 que estaban internados en el Hospital Integrado Covid-19 Santa María del Valle. De ese total, ocho en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) con ventilador mecánico.
Cuando anunciaron su funcionamiento, las autoridades regionales anunciaron que la capacidad de este nosocomio es de 18 camas para hospitalización (con proyección a 60) y 12 para UCI. Sin embargo, está a punto de colapsar, porque empieza a sufrir estragos por la cantidad de pacientes que siguen ingresando y la falta de ventiladores mecánicos y hasta personal.
Por fuentes confiables se conoció que la mayor dificultad que alarmó fue ayer en la noche porque se quedaron sin enfermeras en UCI y en hospitalización. Solo habían dos técnicas en enfermería para ambas áreas. Se supo que un grupo de tres a cuatro enfermeras del Minsa (Ministerio de Salud) renunciaron por un tema de remuneración.
Ante el hecho, los médicos de turno tuvieron que hacer el mayor esfuerzo posible. Sin embargo, el inconveniente persistía, más aún porque desde el lado del Minsa no había respuesta inmediata.