En Huánuco, la segunda jornada del paro convocado por los gremios de transportistas en rechazo al alza de costo de los combustibles, al que se sumaron otros sectores como el agrario; se ha traducido en disturbios en distintos puntos de la región Huánuco. Las carreteras continuaron bloquedas y las actividades en las instituciones públicas y privadas y los comercios paralizaron completamente, generando grandes pérdidas.
Uno de las instalaciones que sufrió la furia de los manifestantes fue el peaje ubicado en la jurisdicción de la provincia de Ambo que fue destruida. Ese punto de la carretera Central fue resguardo por la policía durante el primer día; pero, ante el cansancio de los miembros del orden y al ser numéricamente mayor los manifestantes, lograron llegar para cumplir su cometido. En la zona, un joven de 18 años falleció, un efectivo de la policía optó por lanzarse al río Huallaga para evitar ser atacado y otro agente fue retenido.
Al igual que el primer día, las instituciones públicas y privadas permanecieron cerradas, mientras que las calles de la ciudad de Huánuco presentaban un aspecto desértico. El tránsito vehicular fue nulo y los ciudadanos se movilizaron en bicicletas y caminando; ello, debido a que en el día anterior se registró más de un acto vandálico.
Hoy, la situación es incierta. Se prevé la escasez de los productos en los principales centros de abastos de la región, tales como el mercado mayorista de Puelles y el Mercado Modelo de Huánuco.
Esta vez, en la manifestación participaron también ciudadanos organizados, entre ellos los de la construcción y agricultores que se sumaron a la jornada motivados por el alza de precios de los alimentos de primera necesidad, los fertilizantes y otros.
Pasado las 12 del día, a los manifestantes del sector transporte se sumaron los productores de papa de la provincia de Pachitea y otras zonas, quienes hicieron su llegada por el puente Esteban Pavletich a bordo de camiones de carga, para luego aportarse en la plaza de armas de la ciudad de Huánuco, lugar que abandonaron en horas de la tarde para dirigirse hasta la sede del Gobierno Regional Huánuco en donde sostuvieron una reunión con el gobernador encargado Erasmo Fernández.
Los huelguistas exigen además de la baja del combustible y de los productos de primera necesidad, aumentar la inversión pública en agricultura, educación, salud y otros servicios públicos cruciales, así como otras demandas.
En la ciudad de Huánuco, la jornada de protesta casi se desborda, porque un grupo de vándalos que perjudicaron los legítimos reclamos de los transportistas y otros sectores, intentaron tomar el centro comercial Real Plaza, ubicado en Puelles, como medida extrema ante la inacción del Ejecutivo para atender sus demandas.
Pero, la vandalización del centro comercial se evitó gracias al resguardo de la Policía, que logró detener a varios revoltosos. En el lugar, los más perjudicados fueron los vecinos quienes tuvieron que soportar los gases lacrimógenos y los actos de violencia.
“Castillo, escucha, el pueblo de repudia” «Castillo, renuncia», eran los gritos que retumbaron en casi todo Huánuco en rechazo a la actitud del mandatario, durante las movilizaciones que se registraron en varios puntos de la ciudad de Huánuco, así como en Tinto María, en donde también se registraron actos vandálicos en contra de la propiedad pública y privada, razón por la cual la Policía Nacional tuvo que imponer el principio de autoridad interviniendo a los revoltosos.
Tanto un gremio del sector de transportistas, como de agricultores indicaron que aún no tienen definido si extenderán el paro. Los dirigentes de los agricultores que sostuvieron una reunión con el gobernador Erasmo Fernández, señalaron que esperarán hoy una respuesta del ejecutivo, sobre sus demandas que plasmaron en un acta, el mismo remitido a través del Gobierno Regional de Huánuco a la Presidencia de la República.