La Municipalidad Distrital de Umari que preside el alcalde Camilo Cueva Medina, planteó hasta seis denuncias continuas, desde el 11 de julio, contra un grupo de personas a quienes identificaron como los dirigentes de las protestas que realizan exigiendo al edil rendición de cuentas, cambio de funcionarios y otros. La manifestación incluyó la toma del local municipal.
La lista de denunciados lo encabeza el ex trabajador de esa municipalidad Edwin Remberto Miranda. Luego están: Roger Simón, Rogger Huamán Fuster, Yolanda Inocencio Palomino, Albertino Rivera Sabino, Yoesmin Sánchez Santamaria, Luis Carlos Sama Evaristo, Yoel Sabino Sánchez, Cesar Inocente Pérez, Valentín Lino Retis, Raúl Alex Oviedo, Otiliano Morales, Eugenia Evarista Santamaria, entre otros.
Los acusan de cometer la presunta comisión de los delitos de agresión física, coacción, hurto, usurpación, contra la libertad de trabajo, disturbios y otros. Los actuados se encuentran en el Caso n°200607452-2022-359-0, a cargo del fiscal Jhon Jhordan Ponce Nieves de la Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Pachitea.
Según los documentos, la primera denuncia preventiva fue presentada el 11 de julio del presente año, luego que el 4 de julio los manifestantes fueron retirados de la institución municipal “de forma violenta, con insultos, actos xenofóbicos, coacción y humillaciones”.
El 15 de julio formalizaron la denuncia penal contra los mencionados, por la presunta comisión de los delitos contra el patrimonio en modalidad de daños y hurto; contra la vida, el cuerpo y la salud en la modalidad de lesiones; y contra la libertad en su modalidad de coacción.
Luego, señalando que los funcionarios de la municipalidad fueron llamados a renunciar públicamente ante la asamblea siendo agredidos, coaccionados y discriminados por no ser de la zona; ampliaron la denuncia contra otros dirigentes más que aparecen en la lista.
Con fecha 25 de julio presentaron una denuncia virtual, por la presunta comisión de los delitos contra la libertad en modalidad de coacción, secuestro, violación de la libertad de trabajo, disturbio contra el patrimonio y usurpación, ya que los manifestantes obligaron a los trabajadores bajo amenaza y coacción a dejar las instalaciones de la comuna.
El 1 de agosto plantearon una nueva denuncia por hurto agravado, debido a que habrían sustraído la llave de un volquete que se encontraba estacionado en la puerta del garaje de la municipalidad.
En esta misma fecha ingresaron una denuncia más “debido a que el viernes 15 de julio ingresaron a las instalaciones de la municipalidad y sustrajeron dos costales de documentos”.
Finalmente, el 23 de agosto realizaron una sexta denuncia, contra los mismo, por el delito contra la libertad en su modalidad de coacción, faltas contra la persona en modalidad de maltrato, debido a que el lunes 22 de agosto bajo amenaza y coacción trabajadores de la municipalidad fueron obligados a retirarse de la institución en pleno horario de labores.