
Más de 12 mil pobladores de la capital del distrito de San Miguel de Cauri, en la provincia de Lauricocha, enfrentan una crítica situación debido al colapso total del sistema de tuberías, deteriorado por más de 30 años de antigüedad. La falta de agua potable ha puesto en riesgo la salud de la población, especialmente de los sectores más vulnerables.
Desde la Municipalidad Distrital de San Miguel de Cauri, el área técnica realiza esfuerzos limitados para mitigar la emergencia, reparando tramo por tramo las tuberías dañadas, en un intento por atender esta necesidad básica.
Ante esta situación, el pueblo y sus autoridades exigen al ministro de Economía y Finanzas, Raúl Pérez Reyes Espejo, que destine el presupuesto necesario para ejecutar el proyecto de agua potable y alcantarillado, el cual permanece en cartera desde hace varios meses.
Los más afectados son los estudiantes de nivel inicial, primaria y secundaria, así como adultos mayores, quienes por necesidad están consumiendo agua de ríos y acequias no apta para el consumo humano. Este líquido vital contiene parásitos que podrían generar graves problemas estomacales en la población.
El alcalde distrital, Augusto Tacuche Mariño, calificó como alarmante la situación del suministro de agua potable en San Miguel de Cauri. Señaló que la falta de inversión en infraestructura básica afecta directamente la salud y calidad de vida de los habitantes. “Es urgente que se destine presupuesto para el proyecto de agua potable y alcantarillado. El Ministerio de Vivienda y Construcción ya declaró admisible el proyecto”, sostuvo.
Asimismo, docentes de instituciones educativas de todos los niveles y otras autoridades locales han levantado su voz de alerta, solicitando con urgencia la atención del Gobierno Central y la asignación presupuestal correspondiente para ejecutar el proyecto de agua potable.