La crisis económica de los dos últimos años, derivada en gran parte de la pandemia y, el hecho, de que los establecimientos de salud atendieran de forma prioritaria los casos de Covid-19 generó que, en el 2020, se tenga a un 18% de la población infantil con desnutrición crónica y a un 24% con anemia; porcentaje que disminuyó en el 2021, cuando se llegó a tener a un 16.7% de niños con desnutrición crónica y a un 22.3% con anemia.
De acuerdo a la información que brindó el coordinador de la Estrategia Sanitaria de Alimentación y Nutrición Saludable de la Dirección Regional de Salud, Jimmy Arrieta Alvitez, los índices más altos se registraron en los niños menores de un año y en las mujeres embarazadas.
En tal sentido, comentó que existe la necesidad de contar con un lote de un millón de micronutrientes para el presente año; esto, debido a que, se agotaron los 600,000 que ingresaron el año anterior.
La mayor cantidad de niños con anemia o desnutrición crónica infantil se encuentran en las capitales de las provincias en donde las cuarentenas fueron menos rígida.p
Por ello recomendó el consumo de sulfato ferroso y ácido fólico a las madres en embarazadas.
Una de las consecuencias de Covid ha sido el desabastecimiento de medicamentos en los establecimientos de salud, según contó Arrieta.
