El cabecilla del grupo terrorista Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, murió a horas de cumplir 29 años en prisión

Abimael Guzmán Reinoso, cabecilla de la organización terrorista Sendero Luminoso, falleció hoy, confirmó la jefa del Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), Susana Silva. El deceso se produjo a las 06:40 horas del sábado 11 de setiembre, a horas de cumplir 29 años en prisión.

Según explicó, tras ello se activó el protocolo correspondiente, que implica una comunicación al Ministerio Público para corroborar el deceso y luego remitir el cuerpo a la morgue.

«En eso nos encontramos en este momento», informó Silva.

Tras referir que las causas de la muerte las determinará la morgue en su informe, recordó que el interno presentó un deterioro en su salud desde el pasado 13 de julio.

Dicha condición, mencionó Silva, motivó que tuviera que ser trasladado a un centro hospitalario, lo cual se concretó el 20 de julio, para recibir atención geriátrica.

Indicó, además, que Guzmán recibió el alta médica el 5 agosto y desde entonces era monitoreado en el tópico del Centro de Reclusión de la Base Naval del Callao.

Anteayer, dijo, se reportó que estaba débil y en la víspera un médico del Ministerio de Salud lo atendió. Hoy estaba prevista una segunda atención.

ASÍ FUE SU CAPTURA

Su captura se produjo la noche del sábado 12 de setiembre de 1992, a cargo de un grupo de agentes del Grupo Especial de Inteligencia (GEIN), de la Policía Nacional. A continuación, los detalles de la denominada Operación Victoria.

16.00 horas: Los agentes Ana Cecilia Garzón (Gaviota) y Julio Becerra (Ardilla) llegan a la tienda ubicada al lado de la casa de la calle Varsovia 459 (antes Calle 1), del barrio Los Sauces, en el distrito de Surquillo, donde viven los senderistas Carlos Incháustegui y Maritza Garrido Lecca, quienes han recibido visita.

Previamente, dos agentes varones habían sido designados allí, pero podía resultar sospechoso, entonces Gaviota y Ardilla toman el relevo para esta importante tarea.

La orden es evitar que la puerta que da a la calle se cierre cuando la visita se retire y así poder entrar y registrar lo que allí se escondía. Para ello la instrucción era clara: esperar el momento.

Y esperar significó permanecer en la bodega. “Compramos una gaseosa de 50 céntimos y un chizito. Fueron las cuatro horas (de espera) más largas de nuestras vidas”, recuerda Garzón quien por entonces ya era pareja de Becerra.

Ambos actuaron como lo que eran: dos enamorados que consumían el tiempo conversando y vigilando, sin importar el frío de la tarde ni de la noche que estaba por venir.

Gaviota tenía una radio en la cartera, con la cual discretamente se comunicaba con los otros agentes que hacían vigilancia de cerca. El cerco estaba listo.

16.00 – 19.00 horas: Ocasionales clientes entran en la bodega, mientras tanto Gaviota y Ardilla siguen vigilando. La botella de gaseosa va quedando vacía.

20.00 horas: Hay movimiento al interior de la vivienda.

20.30 horas: La puerta se abre y aparecen Maritza Garrido Lecca, Carlos Incháustegui, y junto a ellos Celso Garrido Lecca, tío de la bailarina, y Patricia Awapara, los dos invitados.

Gaviota y Ardilla se miran. “Es el momento”. Ambos desenfundan sus armas al tiempo que les dicen que son policías y que no se muevan. Maritza grita que los están asaltando.

Inmediatamente, Incháustegui se abalanza sobre Ardilla en un intento por quitarle el arma. Ante ello, Gaviota reacciona y dispara al aire. El tiro desorienta a los intervenidos y es la señal que esperan los otros agentes para entrar.

20.45: Con los intervenidos de cara al suelo, y en cuestión de segundos Ardilla ingresa a la vivienda. En el primer descanso de la escalera observa a una mujer que luego se esconde, él la sigue, ella ingresa a una habitación, él intenta romper la puerta, ingresa. Abimael Guzmán está allí, sentado detrás de un escritorio.

“Si te mueves, te mato”, le dice. El cabecilla de Sendero Luminoso ha caído. “Tenemos al cachetón, tenemos al cachetón”, se escucha decir a los gentes vía radio.

21.00 horas: Los agentes del GEIN, encabezados por el coronel (r) Benedicto Jiménez y el general Marco Miyashiro, comienzan la revisión de la documentación encontrada, la cual permite conocer aún más la estructura de Sendero Luminoso.

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