La continuidad de la obra de asfaltado de la carretera Rancho – Panao se encuentra en serio riesgo de paralizarse debido a la falta de depósitos de materiales excedentes (DME), advirtió Keni Gonzales Orbezo, alcalde distrital de Umari.
El burgomaestre detalló que, de los 13 DME aprobados para la ejecución del proyecto, actualmente solo uno se encuentra habilitado y ha sido utilizado desde el inicio de los trabajos. Dicho depósito está próximo a alcanzar su capacidad máxima, lo que dejaría la obra sin espacios disponibles para el acopio de materiales excedentes.
Recordó que varios de los terrenos inicialmente considerados como DME fueron descartados por fallas geológicas. En otros casos, los propietarios que habían firmado acuerdos con Provías Nacional para recibir una compensación de 50 mil soles, incrementaron sus pretensiones hasta 500 mil soles en promedio. Entre ellos figura la zona de Huayopata, donde se propuso un DME de 10 hectáreas, y el caso de la I.E. 32562 de Panao, que ahora exige la construcción de tres techos, pese a que el acuerdo inicial era de 20 mil soles.
El alcalde lamentó que esta situación impida contar con los DME necesarios para garantizar la continuidad de la obra, señalando que “los enemigos del asfaltado de la carretera son los propios pachiteanos”, al haberse generado una tendencia social que obstaculiza el desarrollo de un proyecto histórico para la provincia.
Ante este panorama, los representantes del Consorcio Vial Huánuco, encargado de la ejecución, advirtieron que, de persistir las condiciones actuales, no tendrán otra opción que paralizar indefinidamente la obra por la falta de depósitos habilitados.
