Durante su programa semanal Con Maduro+, transmitido por Venezolana de Televisión, el líder chavista aseguró que “el que quiera hablar con Venezuela, se hablará face to face, cara a cara, sin ningún problema”. Nicolas Maduro recalcó que quienes busquen dialogar encontrarán en su gobierno “gente de palabra, decente y con experiencia para dirigir a Venezuela”.
Las declaraciones se producen tras los comentarios de Trump, quien señaló que “podría haber discusiones” con el mandatario venezolano, en un contexto marcado por tensiones bilaterales y el despliegue militar de Estados Unidos en el mar Caribe, considerado por Caracas como una “amenaza”.
El ofrecimiento de Maduro llega en un momento en que las relaciones entre ambos países atraviesan un escenario complejo. Washington mantiene sanciones contra funcionarios venezolanos y operaciones militares en la región, mientras Caracas insiste en que cualquier acercamiento debe darse bajo condiciones de respeto mutuo y soberanía.
En septiembre pasado, Maduro ya había enviado una carta a Trump invitándolo a “preservar la paz con diálogo”, aunque en esa ocasión la propuesta fue rechazada por Estados Unidos.
El anuncio ha generado expectativa en la región, pues un eventual encuentro cara a cara entre ambos líderes podría marcar un giro en la política exterior de ambos países. Analistas señalan que, aunque las posibilidades de un diálogo formal siguen siendo inciertas, la disposición pública de Maduro y la apertura de Trump a “discusiones” representan un cambio en el tono habitual de confrontación.







