Delegaciones de Israel y del grupo palestino Hamás iniciaron el lunes conversaciones indirectas en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, con el objetivo de avanzar en la implementación de un plan de paz redactado por Estados Unidos para poner fin a la guerra en Gaza. Las negociaciones, mediadas por Egipto, Catar y Estados Unidos, se centran en la ejecución de la primera fase del acuerdo, que contempla un alto el fuego inmediato y el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos.
El plan, impulsado por el presidente estadounidense Donald Trump, ha recibido respaldo internacional y plantea una hoja de ruta de 21 puntos que incluye la desmilitarización de la Franja de Gaza, la retirada de las fuerzas israelíes y la eventual reconstrucción del enclave. Aunque tanto Israel como Hamás han aceptado parcialmente la propuesta, aún existen diferencias sobre aspectos clave como el futuro gobierno de Gaza y las garantías para el cumplimiento de los compromisos.
Las conversaciones se desarrollan bajo un formato indirecto, en el que las partes no se reúnen cara a cara, sino que comunican sus posiciones a través de mediadores. Por parte de Hamás, la delegación está encabezada por Jalil al Hayyah, mientras que Israel ha designado al ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, como su principal negociador. Estados Unidos está representado por el enviado especial Steve Witkoff y Jared Kushner, asesor presidencial.
El presidente egipcio, Abdel Fattah al Sisi, elogió el plan de paz y destacó que representa una oportunidad para alcanzar una solución duradera al conflicto. Sin embargo, los ataques israelíes sobre Gaza continúan, lo que ha generado preocupación entre los mediadores y podría dificultar el avance de las negociaciones.
Se espera que las conversaciones se prolonguen durante varios días, mientras las delegaciones intentan cerrar los detalles operativos del acuerdo y establecer un calendario para su implementación.
