
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su voluntad de reunirse con sus homólogos de Rusia y Ucrania, Vladimir Putin y Volodímir Zelenski, respectivamente, con el objetivo de explorar vías para poner fin a la guerra en Ucrania. Así lo confirmó la Casa Blanca tras una serie de conversaciones diplomáticas de alto nivel que incluyeron a líderes europeos y representantes de la OTAN.
La iniciativa surge luego de una reunión en Moscú entre el enviado especial de Trump, Steve Witkoff, y el presidente Putin, la cual fue calificada por ambas partes como “útil y constructiva”. Según la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, “los rusos expresaron su deseo de reunirse con el presidente Trump, y el presidente está dispuesto a reunirse tanto con el presidente Putin como con el presidente Zelenski”.
La posibilidad de una cumbre trilateral fue abordada en una llamada entre Trump y Zelenski, en la que también participaron el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, y los líderes de Alemania, Reino Unido y Finlandia. Trump ha expresado públicamente que “la guerra debe terminar” y que trabajará con sus aliados para lograrlo en los próximos días y semanas.
Por su parte, Zelenski confirmó la conversación con Trump y reiteró que la postura de Ucrania es clara: “La guerra debe terminar. Y debe hacerse honestamente. Ucrania defenderá su independencia y todos necesitamos una paz duradera y estable”.
Mientras tanto, Trump ha intensificado la presión sobre Rusia, imponiendo un aumento del 25 % en los aranceles a productos provenientes de India, en respuesta a la continua compra de petróleo ruso por parte de Nueva Delhi. Esta medida busca reducir los ingresos del Kremlin y forzar avances hacia un acuerdo de paz.
Aunque aún no se ha confirmado la fecha ni el lugar de la posible reunión, fuentes cercanas a la Casa Blanca señalan que podría realizarse la próxima semana, en un país neutral o incluso en Washington. La comunidad internacional observa con atención este nuevo intento de mediación, en medio de un conflicto que ha dejado miles de muertos y millones de desplazados desde su inicio en 2022.