
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes la extensión de la tregua arancelaria hasta el 1 de agosto, dando un nuevo plazo a sus socios comerciales para alcanzar acuerdos bilaterales. La medida, oficializada mediante una orden ejecutiva, busca ganar tiempo para cerrar pactos “justos y beneficiosos para los trabajadores estadounidenses”, según indicó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Sin embargo, Trump también confirmó que ya se han fijado nuevas tasas arancelarias para varios países que no han mostrado avances en las negociaciones. Japón y Corea del Sur, por ejemplo, deberán pagar un 25 % sobre sus exportaciones a Estados Unidos a partir de agosto. En el caso japonés, la tasa sube un punto respecto a lo anunciado en abril.
Además, una docena de países enfrentará aranceles unilaterales que oscilan entre el 25 % y el 40 %, entre ellos:
Países afectados | Nuevas tasas arancelarias |
---|---|
Birmania, Laos | 40 % |
Camboya, Tailandia | 36 % |
Serbia, Bangladesh | 35 % |
Indonesia | 32 % |
Sudáfrica, Bosnia y Herzegovina | 30 % |
Túnez, Kazajistán, Malasia | 25 % |
Algunos de estos porcentajes fueron ajustados respecto a lo anunciado en abril: Camboya y Laos vieron reducciones, mientras que Malasia y Japón experimentaron incrementos.
Las cartas enviadas a los gobiernos de estos países —publicadas en la red Truth Social de Trump— advierten que los aranceles podrían modificarse “al alza o a la baja” dependiendo de la voluntad de cada país para eliminar sus propias barreras comerciales. “Usted nunca quedará decepcionado con Estados Unidos”, escribió Trump en los mensajes oficiales.
Hasta ahora, solo China, el Reino Unido y Vietnam han logrado acuerdos con Washington. En el caso de Vietnam, se acordó una tasa del 20 %, muy por debajo del 46 % inicialmente propuesto, además de una cláusula para evitar el transbordo de productos chinos.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, advirtió que el 1 de agosto no es una nueva fecha límite, sino el inicio de la aplicación automática de los aranceles anunciados el 2 de abril para los países que no hayan cerrado acuerdos.
La comunidad internacional observa con atención esta nueva fase de la política comercial de Trump, que podría tener un impacto significativo en el comercio global y en las relaciones diplomáticas de Estados Unidos.